Agregó que la distribución de la riqueza que genere el país también es fundamental en este propósito.
“La igualdad es posible si somos capaces de crear y generar riqueza para todos y todas, y si somos capaces de distribuirla más justamente. Por eso, proponemos una economía basada en la producción, el trabajo y el conocimiento. Y es por ello por lo que proponemos una reforma tributaria que genere justicia”, explicó el Presidente Gustavo Petro en su discurso de posesión, en el que, además, trazó los ejes del ‘Gobierno de la vida’ en el campo económico.
El Mandatario hizo énfasis en la búsqueda de la igualdad, en especial, cuando el 10 por ciento de la población colombiana tiene el 70 por ciento de la riqueza, lo que calificó como “un despropósito y una verdadera amoralidad”.
“No miremos para otro lado, no seamos cómplices. Con voluntad, políticas de redistribución y un programa de justicia vamos a hacer una Colombia más igualitaria y con más oportunidades para todos y todas”, expresó.
Para ello, afirmó que “los impuestos no serán confiscatorios, simplemente serán justos, en un país que debe reconocer como aberración la enorme desigualdad social en la que vivimos, en un Estado que debe proteger la transparencia del gasto y en una sociedad que se merece vivir en paz”.
Enfatizó en que la justicia en materia tributaria consiste en que quienes más tengan, más pongan en impuestos, pero también en la distribución de esa riqueza que produzca el país.
“El llevar una parte de la riqueza de las personas que más tienen y más ganan, para abrirle las puertas de la educación a toda la niñez y la juventud, no debe ser mirado como un castigo o un sacrificio; es simplemente el pago solidario que alguien afortunado hace a una sociedad que le permite y le garantiza la fortuna”, agregó.
Añadió que, si el país en su conjunto “es capaz de llevar una parte de la riqueza que se crea a los niños y niñas desnutridas, a través de algo tan simple como pagar los impuestos de ley, seremos más justos y estaremos más en paz. No es un asunto solo de caridad, es un asunto de solidaridad humana”.
Explicó que la solidaridad es lo que ha permitido que los pueblos sobrevivan y logren las máximas conquistas de la cultura y de la civilización.
“No hemos avanzado como humanidad compitiendo, lo hemos hecho ayudándonos. Por eso estamos vivos en este planeta. Seremos iguales cuando el que más tiene al pagar sus impuestos lo haga con gusto, con orgullo, sabedor que ayudará a su prójimo, niño, niña, bebé, joven, mujer, a crecer sano, a pensar, a vivir con la plenitud que da la nutrición y la educación del cerebro y del alma”, puntualizó.
Añadió que la solidaridad está en el impuesto que paga el que puede pagarlo y en el gasto del Estado que va dirigido a quienes lo necesitan por su infancia, por su juventud y por su vejez.
“Por eso hemos planteado una reforma tributaria, una reforma de la salud y de las pensiones, una reforma del contrato laboral, una reforma de la educación. Por eso hemos priorizado en el presupuesto la infraestructura de la educación, de la salud, del agua potable, de los distritos de riego y de los caminos vecinales”, dijo.
“No naturalicemos la desigualdad y la pobreza. No es cierto que el mundo sea igual, no es cierto que en la mayoría de los países del mundo esta desigualdad social que tenemos en Colombia exista. Somos una de las sociedades más desiguales en todo el planeta tierra”, apuntó.