Óscar Andrés Rodríguez, de 28 años, es una persona con discapacidad visual que juega al ajedrez en los Juegos de la Función Pública 2022.
Poco a poco, los concursantes de ajedrez comienzan a llegar al salón en donde deberán enfrentar la competencia, entre ellos, sobresale un hombre que, con un rostro que refleja alegría y optimismo, se abre paso en el recinto con ayuda de su bastón guía, él, es Óscar Andrés Rodríguez, una persona con discapacidad visual que participa en los Juegos de la Función Pública 2022.
Rodríguez, bogotano de 28 años, es periodista y trabaja en la oficina de comunicaciones de la Superintendencia de Salud, como parte del equipo que está a cargo de la revista de la entidad. Es un apasionado del ajedrez que nunca ha tenido límites para hacer lo que le gusta.
«Desde los seis años me interesé por este juego, mis papás me inscribieron en escuela y club de ajedrez. El aprendizaje fue común y corriente porque la nomenclatura es la misma en todos los tableros, entonces nunca hubo diferencia», comenta.
Y es que Óscar hace esa aclaración porque debido a su situación, utiliza un tablero adaptado que le ayuda a identificar el color de las fichas y los movimientos que debe realizar.
«El ajedrez para ciegos tiene unos huecos en cada casilla. Entonces, de la A1 a la H8, las piezas tienen un clavo en la parte inferior y se ajustan en el tablero. Las piezas negras tienen un hueco en la parte superior para que se puedan diferenciar de las blancas», cuenta Rodríguez hace todos los movimientos desde su tablero, incluyendo los que corresponden a su oponente, mientras ese otro jugador, de manera simultánea, lo hace en un tablero convencional; siempre hay una tercera persona a quien Óscar le pide el favor de que le indique cómo va moviendo su rival.
De esta manera, Rodríguez ha jugado al ajedrez desde niño. «Utilizo un tablero adaptado en virtud de que soy una persona ciega, pero eso no implica mayor diferencia porque el ajedrez es un juego de mente, no de ojos», puntualiza.
A lo largo de su vida, Óscar ha participado en cerca de siete torneos de ajedrez, en los cuales ha conseguido victorias y derrotas que, al final, son lo menos importante para él. «Yo aprovecho estos espacios es porque en ellos me divierto, me entretengo, la paso bien y conozco gente diferente. Hay personas que tienen mucho más nivel, pero no pasa nada», concluye.
Es el último día en las competencias de ajedrez de los Juegos de la Función Pública 2022, Óscar jugó en cuatro oportunidades, de las cuales ganó dos y perdió dos, resultados que lo dejan más que satisfecho porque su objetivo no era más que disfrutar un nuevo espacio que le brindó el deporte social comunitario.