Un ejercicio de cultura ciudadana por un mejor aprovechamiento de los desechos del hogar.
Como parte del mensaje de conciencia ambiental que la Empresa de Aseo de Pereira lleva a la comunidad a través de los vigías, también se suman los recicladores vinculados a diferentes organizaciones de reciclaje que apoyan esta labor en los barrios y unidades residenciales de la ciudad, así como en la zona rural y que hacen parte de la realización del concurso Ecobarrios.
De acuerdo con ellos, es vital seguir motivando a los pereiranos a que realicen una adecuada separación de sus residuos a diario, por varias razones:
– Se incentiva la práctica de reducir, reutilizar y reciclar en los hogares
– Se contribuye a generar mayor material aprovechable que les sirve a los recicladores de oficio quienes sustentan a sus familias con este trabajo
– Se contribuye al aumento de la tasa de aprovechamiento porque se evita que plástico, cartón, papel, metal, vidrio y tetrapak lleguen al relleno sanitario La Glorita.
“Invitamos a la comunidad para que por favor cuando estemos separando el material, nos entreguen el cartón, las botellas plásticas o de vidrio limpias y secas. Si hay vidrios rotos, que los guarden aparte por favor.
Lo ideal es que el material no esté mojado y así nuestra labor será mucho más productiva”, explicó Yolanda Pérez, recicladora de Infinity Recycle. Marly Colmenares, recicladora que llegó desde Venezuela hace unos meses, se dedica a esta labor e invita a los ciudadanas a que apoyen esta labor para que Pereira esté bien limpia y aseada.
Gerardo Rodríguez, reciclador de oficio asignado a la unidad residencial Gamma 3 expresó: “Gracias a todos los que se han vinculado al concurso Ecobarrios y a los que diariamente separan los residuos en sus casas. Llevo 3 años laborando en este oficio, acá la gente saca bastante reciclaje y esto además de servirle al medio ambiente es un complemento nuestro sustento diario”.
Dato de interés Entre el material que se puede reciclar están: cartón, plástico, papel, vidrio, metal y tetrapak.