Durante una sesión especial los congresistas expresaron sus puntos de vista por la situación del principal producto de la economía.
Durante una sesión especial convocada el miércoles 16 de agosto, la Comisión Accidental del Eje Cafetero, conformada por 19 Representantes a la Cámara de Caldas, Quindío, Risaralda y Tolima, se pronunció firmemente sobre la actual crisis que enfrenta el sector cafetero del país, una de las industrias más tradicionales y emblemáticas de Colombia.
Dando inicio a la reunión que tuvo lugar en la Cámara de Representantes, se presentaron los logros y avances realizados por la Comisión Accidental durante la legislatura pasada. Además, se delinearon temas críticos y se establecieron acciones concretas a mediano plazo que serán desarrolladas por la Comisión con el objetivo de enfrentar y mitigar la crisis cafetera.
Los Representantes, con visible preocupación, remarcaron la gravedad del asunto: “Estamos hablando de miles de familias en nuestros departamentos que dependen directamente del café. Si hay un sector que busca la solidaridad rápida, es el cafetero. Son los caficultores quienes requieren de nuestra atención y acción urgente”.
Durante la sesión, los congresistas también manifestaron que el escenario es desalentador. Las cotizaciones del café han sufrido un desplome significativo, situándose en $1.250.000 por carga, una cifra preocupante si se compara con los precios anteriores que rondaban los $2.400.000. Los factores internacionales, junto con la importación creciente de café, han dañado la calidad y precio del producto colombiano en el mercado global. Un punto alarmante discutido con profundidad fue el estado crítico de las cooperativas del sector cafetero. Estas entidades, esenciales para la organización y venta del café a nivel regional, enfrentan serias dificultades.
“La realidad es que muchas de nuestras cooperativas, pilares en la estructura del Eje Cafetero, se encuentran en una crisis sin precedentes, sobre todo por las ventas a futuro”, indicó uno de los representantes.
El impacto de la crisis se siente en cada rincón del país. Según datos compartidos durante la sesión, alrededor de 631 municipios en Colombia dependen directamente del cultivo y comercialización del café. Esto se traduce en aproximadamente 500.000 familias que ven en el café su principal y, en muchos casos, único sustento.
“Desde nuestra posición en la Comisión, representamos una gran parte de los cafeteros de este país. Nuestra misión no es sólo ser voz de estos productores, sino actuar en pro de soluciones reales. Los cafeteros esperan más que palabras; esperan acciones decididas y medidas concretas que reviertan esta situación”, fue otra de las conclusiones de la Comisión.
Entre las acciones demandadas al Gobierno Nacional se encuentran: medidas de alivio financiero y estabilización de precios; estrategias para la renovación de cafetales; fortalecimiento de la competitividad e innovación del sector; atención urgente a las dinámicas de desigualdad y abandono de las familias cafeteras; entre una larga lista de demandas históricas respaldadas desde el legislativo.
Por este motivo, dada la magnitud de la crisis que enfrenta el sector, la Bancada del Eje Cafetero ha acordado citar a los Ministerios de Hacienda, Agricultura, Comercio, Departamento Nacional de Planeación y a la DIAN, así como a la Federación Nacional de Cafeteros en calidad de invitado, a debate de control político en el marco de la Plenaria de la Cámara de Representantes.
Este pronunciamiento no solo reafirma la solidaridad de la Bancada de Congresistas del Eje Cafetero con los cafeteros de Colombia, sino que también marca un compromiso firme para desarrollar estrategias efectivas que enfrenten la crisis. El propósito es que, con esfuerzos conjuntos y decisiones acertadas, el sector cafetero colombiano pueda recuperar su brillo y continuar siendo uno de los principales motores del desarrollo económico, social y cultural de Colombia.
