A partir de una actividad dirigida por las profesionales psicosociales de la Unidad para las Víctimas en el Eje Cafetero y encaminada a la estrategia Memorias Reparadoras, cerca de 20 integrantes de la mesa de víctimas de Pereira se reunieron en el Centro Regional Para La Atención A Las Víctimas, CRAV.
Se realizó una contextualización de esta conmemoración con la construcción de un lienzo de la memoria histórica de las víctimas de esta zona del país. El objetivo primordial fue sensibilizar a los participantes sobre el papel de la memoria como herramienta de reparación integral y su aporte a la verdad.
“Esta es la primera vez que desarrollamos esta conmemoración en el país y queríamos hacerlo con los líderes de las mesas. Les dimos a conocer un nuevo elemento que sin duda apunta a la recuperación del tejido social de la población. La memoria nos lleva a recordar para no olvidar y eso nos lleva a trabajar en la garantía de la no repetición”, dijo Laura Moreno Mejía, directora de la Unidad en el Eje Cafetero.
También se buscó rendir tributo a aquellas personas que han dedicado su existencia a defender los derechos humanos de los más vulnerables y a quienes se han empeñado en que la verdad se conozca, incluso dando su vida por ese fin.
El director general de la Unidad para las Víctimas, Ramón Rodríguez, dijo que desde 2018 se han implementado nueve actos de reconocimiento de responsabilidades y solicitud pública de perdón y cuatro actos de dignificación como medidas de satisfacción; esto en cumplimiento de 13 fallos de Justicia y Paz (Ley 975 de 2005) y en donde, además, han participado víctimas reconocidas por diferentes hechos.
“Estos espacios son muy relevantes para nosotros como víctimas porque nos dignifican y nos ayudan para no olvidar nunca lo sucedido. A través de este ejercicio de memoria seguimos fortaleciendo nuestro liderazgo, pues son estas actividades las que apuntan a la recuperación emocional individual y, por consiguiente, a la colectiva”, expresó una de las víctimas que asistió al evento, Katery Albornoz.
A su vez, Albert Marín, otro de los asistentes, concluyó: “Hacer memoria es reconstruir el pasado para dar pasos firmes a futuro. Tenemos que dejar los relatos, los escritos, que las nuevas generaciones puedan encontrar lo vivido para que no repitan esa historia”.