La operación ha sido considerada la más grande realizada por las autoridades en lo corrido del 2023.
La Fuerza Aérea Colombiana y la Armada Nacional propinaron, en las últimas horas, un duro golpe a las organizaciones criminales asociadas con actividades del narcotráfico al incautar, en aguas del Mar Caribe, 5,5 toneladas de cocaína, por un valor que supera los 184 millones de dólares.
Los resultados se consiguieron gracias a la ejecución de tres grandes operaciones conjuntas en las que también participaron el Servicio Nacional Aeronaval de Panamá (SENAN) y la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial del Comando Sur de los Estados Unidos (JIATFS), quienes apoyaron las maniobras del personal de las Fuerzas Militares colombianas con personal y recursos logísticos.
Los trabajos de interceptación de los alijos –los cuales representan más de 13 millones de dosis de cocaína en el mercado ilegal internacional– han sido considerados como la operación exitosa de interdicción e incautación más grande realizada por las autoridades en lo corrido del 2023.
De hecho, la operación fue destacada por el Presidente Gustavo Petro en su cuenta de Twitter, en la que resaltó la colaboración entre “las autoridades de Colombia, Panamá y Estados Unidos”.
De esa forma, el Gobierno del Cambio avanza en la nueva Política de Seguridad, Defensa y Convivencia Ciudadana para la protección de la vida que enfoca la lucha contra las drogas en contrarrestar principalmente las economías y rentas ilícitas.
Primer golpe: 1.915,3 kilos incautados
La primera acción de interdicción se produjo a 120 millas náuticas al noroeste del Golfo de Morrosquillo. Allí se detuvo una embarcación tipo go fast tripulada por cinco personas –cuatro colombianos y un panameño–, quienes al detectar la presencia de las autoridades emprendieron la huida realizando maniobras evasivas y arrojando una cantidad indeterminada de bultos al mar.
Las unidades navales consiguieron al final interceptar la embarcación e incautar 77 bultos que contenían 1.911 paquetes rectangulares. La sustancia fue sometida a la Prueba de Identificación Preliminar Homologada (PIPH) que arrojó positivo para 1.915,5 kilogramos de clorhidrato de cocaína.
Segundo golpe: 2.198 kilos incautados
La segunda operación se desarrolló a 97 millas náuticas al noroeste del Golfo de Morrosquillo, donde se logró la detección e interdicción marítima de una segunda embarcación, también tipo go fast.
Al realizar la verificación de la lancha fueron hallados en su interior 88 bultos con 2.198 paquetes rectangulares, transportados por cuatro personas de nacionalidad colombiana.
Al parecer, el cargamento tenía como destino las costas de Honduras. El alijo incautado contenía 2.198,4 kilogramos de clorhidrato de cocaína.
Tercer golpe: casi 1.500 kilos incautados
El tercer golpe culminó con la recuperación de 56 bultos, con 1.367 paquetes rectangulares con clorhidrato de cocaína, que fueron arrojados desde una lancha rápida en aguas del Mar Caribe, cuando los sujetos que la tripulaban se percataron de la presencia de los uniformados, emprendiendo la huida.
El personal capturado y el material incautado en las operaciones fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para continuar el proceso de judicialización de acuerdo al procedimiento establecido.
Con estos resultados conjuntos y multinacionales se consiguió el objetivo de afectar la cadena logística y financiera de los grupos que utilizan los corredores marítimos para el transporte de drogas ilícitas.
De esta forma, la Fuerza Naval del Caribe ha evitado que un total de 45,1 toneladas de clorhidrato de cocaína lleguen a sus puertos de destino en lo corrido del año, asestando un golpe de 1.521 millones de dólares a las finanzas de las organizaciones multicrimen.