El Jefe de Estado visitó la Base de la Policía Antinarcóticos en Necoclí, Antioquia, en donde se desarrollaron tareas que hicieron parte de la operación contra alias ‘Otoniel’.
El combate contra el narcotráfico en Colombia tuvo un punto de inflexión con la captura de alias ‘Otoniel’, capo del Clan del Golfo, a través de la Operación Osiris liderada por la Fuerza Pública.
Así lo destacó el Presidente de la República, Iván Duque Márquez, quien visitó la Base de la Policía Antinarcóticos ubicada en el municipio de Necoclí, en el departamento de Antioquia, en donde condecoró a varios de los integrantes de la institución que participaron en el gran operativo.
“Gracias por lo que han hecho por Colombia, gracias por su entrega a la patria. Este es el triunfo de todos y aquí no hay triunfos individuales. Lo que aquí se ha logrado marcará un precedente para siempre en las operaciones, porque la Operación Osiris será recordada como la más grande acción contra el narcotráfico en este siglo en nuestro país”, remarcó.
El Jefe de Estado también resaltó que la operación fue reconocida por todos los diarios del mundo y ha sido destacada por todos aquellos que sufrieron la violencia del delincuente.
“Hoy Colombia se hace grande y vamos por más. Ya el Clan del Golfo tiene sentenciado su final. Por eso, a ‘Chiquito Malo’ y a ‘Siopas’, el otro bandido alcahueta de ‘Otoniel’, el mensaje que se les entrega es clarito: o se entregan o vamos por ustedes”, añadió.
El Presidente Duque expresó su complacencia con la milimetría de la Operación Osiris y su precisión, a través del trabajo por cuadrículas territoriales, el cierre, cerco y cacería contra el antisocial, junto con toda la labor de inteligencia.
“La información se trabajó para llegar a él y lograr su captura. El precedente para siempre en este país es que no hay bandido alguno que se pueda esconder del Estado colombiano”, puntualizó.
La lucha continúa
El Mandatario rindió también un homenaje a los integrantes de la Policía que participaron en la Operación Osiris y recordó cómo los padres, madres, hermanos, hermanas, esposas e hijos de los uniformados tienen que enfrentar sus ausencias, porque tomaron el camino de darlo todo por Colombia.
“Hoy Colombia les da ustedes un reconocimiento para seguirlos motivando. Encarnan ustedes los valores y principios de nuestras instituciones, de una Policía de 130 años, de un Ejército de más de 200 años y, como su Comandante Supremo, puedo decirles que cuentan conmigo, porque así como están dispuestos a dar la vida por Colombia, yo estoy dispuesto a dar la vida por ustedes. Me siento supremamente orgulloso de ser su Comandante Supremo”, sostuvo.
Agregó que su presencia en Necoclí, municipio amenazado por la violencia de alias ‘Otoniel’, confirma que las autoridades llegan a donde tienen que llegar. “A nosotros no nos pone el ritmo la delincuencia; la vamos a seguir combatiendo, como lo hemos hecho en este Gobierno. Yo le prometí a Colombia que caería este bandido, lo volví un compromiso personal, lo saben los generales, no hubo un solo día que no trabajáramos en la configuración de esta operación”, dijo.
Finalmente, aseguró que el resultado obtenido fue el fruto de un trabajo desplegado durante años y, aunque en muchas ocasiones la fortuna no permitía su captura, gracias al heroísmo de la Fuerza Pública y a los tiempos de Dios, que, dijo, “son perfectos”, se logró dar este golpe al narcotráfico.